Está condenado a perpetua por matar a dos adolescentes y fue visto en un partido de fútbol

Mariano Bonetto, un veterinario condenado a prisión perpetua en 2018 por el asesinato de Natalia Grenbenshicova y Nuria Couto en el barrio de La Boca, fue declarado inimputable cuatro años después por problemas de salud mental y trasladado al hospital Borda. Recientemente, fue visto presenciando un partido de fútbol en Córdoba, lo que generó una fuerte indignación tanto en las familias de las víctimas como en el juez que dictó su condena.

Bonetto apuñaló a las adolescentes el 11 de octubre de 2016, cuando estaban sentadas en el parque Irala, tras salir de la Escuela Superior de Bellas Artes Manuel Belgrano, y una de ellas tocaba la guitarra mientras celebraban el cumpleaños de uno de los integrantes de su grupo.

Ambas fueron trasladadas al Hospital Argerich: Nuria, de 18 años, murió allí el 5 de noviembre, mientras que Natalia, una chica de nacionalidad rusa de 15 años, lo hizo el 24 de ese mes. Un amigo de las jóvenes también fue herido por Bonetto en su afán por defenderlas, pero afortunadamente ninguna de sus lesiones fue de gravedad.

Según comprobó la Justicia, el hombre, que por entonces tenía 27 años y hacía tres días estaba en Buenos Aires, las agredió con un arma blanca sin mediar palabra. En ese momento intervino un vecino, quien se lanzó contra el atacante, le quitó la navaja y se la clavó en el cráneo.

Su condena llegó dos años más tarde, en 2018, y su declaración de imputabilidad por parte de la Cámara Nacional de Casación, que también incluyó su internación en un neuropsiquiátrico, seis después del hecho.

El informe elaborado por la junta médica integrada por profesionales del Cuerpo Médico Forense, de la defensa y de las partes querellantes concluyó por "unanimidad" que la afección padecida por el acusado era un cuadro psicótico compatible con síndrome delirante crónico, que se corresponde con una alteración morbosa de sus facultades mentales.

Según los especialistas, eso "le ha impedido en el momento del hecho comprender las características del acto y la dirección de sus acciones".

En diciembre de 2024, en tanto, la jueza Patricia Somer, del juzgado civil N°25, ordenó su traslado a una clínica de salud mental en Córdoba, de donde Bonetto era oriundo.

Sin embargo, en los últimos días, aparentemente ya de alta, alguien lo filmó en una cancha de fútbol de la ciudad de Laborde, viendo un partido entre los clubes Recreativo y Olimpo, y las imágenes no tardaron en llegar a ojos de los familiares de las víctimas, quienes difundieron el video y no ocultaron su indignación por encontrar al asesino de las adolescentes en libertad.

La familia de una de las víctimas reclamo impunidad

“Desde el año 2022 protestamos mil veces, con cada intento que hicieron por trasladarlo del Borda. Hasta que lo lograron y lo hicieron sin avisarnos”, cuestionó Anna Rodionova, la mamá de Natalia, en declaraciones a TN.

En ese sentido, agregó: “Yo siempre dije que el traslado a Córdoba, a escondidas y en plena Navidad, fue pensado para eso, para liberarlo”.

“Solo me extraña que sucedió tan rápido, no se dignaron ni a esperar un poco. Se nos ríen en la cara”, se quejó abiertamente.

Según se supo, las familias apelaron la última medida dispuesta sobre Bonetto ante la Corte Suprema y se encuentran esperando una resolución.

Otra de las voces que expresó su preocupación fue Ángel Nardiello, uno de los jueces del Tribunal Oral en lo Criminal N°22 que condenó a Bonetto en 2018. El magistrado consideró que su libertad “es consecuencia” de una Ley de Salud Mental a la que calificó como “desastrosa”.

Además, también en diálogo con TN, recordó: “Nosotros lo tuvimos en directo a Bonetto, y quedó claro que seleccionó el mecanismo para matarlas y las personas a las que iba a matar”.

Por último, reflexionó: “Él comprendió la criminalidad de sus actos y por eso fue condenado a perpetua por el tribunal que yo integro. Es un hecho gravísimo. Pero más grave es que pueda estar entre nosotros pudiendo padecer algún tipo de alteración”.