¿Quién dijo que todo está perdido, rojo?
De pie. Independiente cayó 4 a 3 como local ante Libertad. En la revancha debe ganar por dos goles para pasar. Difícil pero no imposible.
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Entre Porra y Doglioli armaron la gran jugada para que Sarraute abriera la cuenta casi desde el vestuario, algo similar a lo que ocurrió ante Cipolletti, cuando también arrancó arriba y luego se durmió. Justamente un ex Cipo, Matías Zbrun, aprovechó una desinteligencia de Artaza para empujarla y poner paridad en la fría tarde de La Chacra.
Minutos más tarde, el capitán Berra, de flojo partido, perdió una pelota en mitad de cancha y Patricio Cucchi encaró por el medio y remató de larga distancia para ponerla pegada al palo de Villalba y dar vuelta la historia antes de los 25 minutos. Por si fuera poco, antes del final, un pelotazo largo peinado por Zbrun le quedó otra vez al número 10 Cucchi para definir mano a mano ante el arquero y estirar la ventaja a poco del cierre de la etapa.
"Nos dormimos en el arranque. Pagamos caro esos errores, pero demostramos que estamos vivos. Vamos a salir con todo allá". Leandro Teijo. El mejor del mediocampo albirrojo
"Faltan noventa minutos, no nos vamos a entregar. El gol de Manuel a lo último nos dio vida y queda todo un partido por delante". Víctor Manchafico. Defensor central de Independiente
"Fue un partido difícil en el que no tuvimos solidez defensiva y lo pagamos caro. Sabemos que son 180 minutos y mantenemos la ilusión". Gustavo Coronel. Entrenador del equipo neuquino
"Intentamos todo el partido. Ellos jugaron de contra y a forzar el error nuestro. Somos equipos parejos, la serie está abierta". Orlando Porra. El 10 tuvo un buen primer tiempo.
Ya en el complemento, llegando a los 15, Libertad encontró el cuarto tras una salida rápida de un full inexistente, que agarró mal parado a los neuquinos y Gabriel Gudiño no perdonó. De ese saque desde el medio llegó el descuento para el Rojo. Entre los dos ingresados, Ávila y Sack, generaron la jugada para que el primero definiera bien en el mano a mano y pusiera el 4 a 2. El local siguió yendo con pocas ideas pero con mucho ímpetu y sobre el final apareció la cabeza de Manolo Berra para poner cifras definitivas y darle una luz de esperanza al Rojo de cara a la vuelta.
Ahora, Independiente deberá ganar en Sunchales por dos goles de diferencia para poder pasar de fase y seguir haciendo historia.
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